¿Cómo dibujar en
este silencio pesado tu viva voz?
¿Cómo amedrentar
esta, mi sombra fútil?
¿Cómo erigir una
torpe sonrisa núbil?
¿Cómo entonar el
canto para que no muera en tos?
Me pesan las
caricaturas, el mudo alboroto.
Me asombra esta
pasta de almendras pegajosas.
Sonrío torpemente
a las elecciones nubosas
Y toco este réquiem
para un laúd siempre roto.
A las espinas de
un cactus, les designo mi piel
A la cáscara de
una nuez, le encomiendo el naufragio
A las nubes metamórficas,
mi aprender cambiantemente
A las notas y la
partitura, una cuerda más decente…
A mis manos
inertes, que sigan el burdo adagio
De jugar a la
cursiva entre la hiel y la miel.
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